“Matagallan”
Festivo con la algarabía y despedida del año viejo, entre nostalgias y esperanzas, cual frágil e inocente recién nacido, llegaba Enero; Yoyo, tío materno de mayor edad, esperanzado en día de reyes como última oportunidad para su regalo. Beto, apuraba la faena; fin del mantenimiento en las embarcaciones después de la veda, al séptimo día, como Dios hizo al mundo, debían estar en el mar. Mundo de fabulas en madrugadas de pesca, donde; tirados sobre cubierta mirando al firmamento, cada estrella fugaz definía, llevaba consigo un sueño, un secreto hasta la más brillante y portentosa estrella de la mañana.
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(99 palabras sin contar el título)
Publicación relacionada con: Escribir Jugando Enero
Entre Morrocoyes, Camaleones y Especuladores 
Tu creación, Nevel, está entre la narración y la poesía, me parece una forma muy bella de narrar. Cómo explicas la labor de un pescador y lo entremezclas con el inicio del año, como un nuevo nacimiento que trae esperanza y de los «regalos» familiares.
Muchas gracias por participar.
Un saludo y hasta pronto 🙂
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Hola Nevel
Para un pescador, el mar es siempre un regalo cotidiano.
Un abrazo
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Más que un regalo, es la vida toda. Saludos
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Tu micro me ha hecho recordar esas noches de verano tendida en la playa a mirar el cielo… no sé si hay cosa más bella que el mar y el firmamento…
Un beso.
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Para quienes viven y disfrutan del mar, esa es la vida diaria. Saludos
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